Energías renovables

Energías renovables

Ensayos y monitorización de componentes eléctricos en centrales eólicas 

La asesoría de las condiciones de las herramientas eléctricas en las centrales eólicas es probablemente una de las tareas más complicadas en la gestión de los componentes de generación de energía. El esfuerzo proveniente de los impulsos eléctricos de energía en un ambiente duro afecta a los componentes eléctricos de las turbinas de viento. Además, las turbinas de viento son caras y son componentes fundamentales, necesitan inspecciones duraderas, reemplazar o recuperar piezas tras una avería, especialmente en las instalaciones marinas. 

La fiabilidad de los sistemas eléctricos cuando hay conversores de frecuencia se puede reducir significativamente por la existencia de descargas parciales (DP) y tensión o corriente transitorias, lo cual puede afectar al aislamiento del equipo eléctrico instalado. El suministro de impulsos de tensión da lugar a sobretensiones y a distribuciones de potencia irregulares, lo que origina un esfuerzo dramático en el aislamiento eléctrico. Se ha demostrado de manera experimental que el envejecimiento se acelera significativamente con ondas de impulso de alta frecuencia con respecto a las ondas sinusoides. 

El creciente número de apagones durante el servicio ha aumentado la conciencia en la industria de la necesidad de la monitorización de las condiciones de las herramientas eléctricas casi al mismo nivel que la monitorización de las herramientas mecánicas. Tanto los encargos de ensayos como las modernas tecnologías de monitorización de las condiciones en línea respaldan el cambio entre los programas de mantenimiento basado en el tiempo (TBM) a intervalos de tiempo fijos y el mantenimiento basado en las condiciones (CBM). 

La monitorización de las condiciones ayuda a detectar posibles fuentes de problemas en una fase muy temprana y tomar las medidas para evitarlos antes de que ocurran averías irreversibles y muy perjudiciales. Se pueden evitar las averías inesperadas que causan apagones de larga duración y, por lo tanto, se pueden limitar los costes derivados de la pérdida de ingresos y de la reparación de las averías.